“El sector público español tarda 145 días en saldar sus deudas, frente a los 65 días de media en el resto de Europa”.
Los impagados constituyen uno de los factores que afecta más fuertemente a muchas de las pymes de nuestro país, que se acaban encontrando con problemas financieros. La morosidad está estrechamente vinculada a la estructura económica. En épocas como la actual, en la que los resultados económicos atraviesan un momento difícil, a las empresas en general les cuesta cada vez más cumplir con sus obligaciones de pago adquiridas.
Las empresas que contratan de forma habitual con la administración pública, se juntan con las dificultades de cobro y con la presión que supone el interés en no perderla como cliente. Se da la paradoja de que, aunque las distintas administraciones deberían ser las primeras en dar ejemplo en este campo, la realidad es bien diferente ya que, son estas las que más proceden a dilatar en el tiempo los pagos a los que vienen obligados con las distintas empresas españolas con las que contratan en múltiples sectores.
Se trata de una nueva línea de avales ICO-anticipos empresas y autónomos con entidades locales, de esta forma pone a disposición de los empresarios liquidez.
Entidades financieras como el BBVA ya anunciaron sus acuerdos con el ICO para facilitar la financiación de inversiones de empresas y autónomos, así como proporcionar liquidez y capital circulante a las compañías en un escenario de restricción del crédito.
circulo gacela
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